Estamos en invierno y con él la montaña no sólo cambia de aspecto sino que adquiere un carácter distinto al que estamos habituados y se convierte de pronto en “otra”; saber valorar esos cambios es lo que nos convierte en montañeros experimentados.
Estos cambios son muy acusados y actúan directamente sobre todos los aspectos de la preparación de las actividades, lo que nos hace tener que revisar concienzudamente todos nuestros preparativos antes de salir hacia ella.
En este pequeño artículo haremos un repaso de los factores que requieren un cambio de perspectiva.
Terreno
El aspecto principal dado que sobre él es donde vamos a desarrollar la actividad, una de las características principales de la montaña invernal es la continua transformación de sus condiciones, la nieve y su metamorfosis, al acción del viento, lluvia y temperaturas hace que la montaña sufra cambios muy rápidos que hacen que una de nuestras principales acciones sea saber el estado de la montaña. Una tranquila actividad de montaña se puede convertir en un infierno si no somos capaces de evaluar los cambios.
Humano
La parte más sensible, la montaña invernal nos va hacer sacar lo mejor de nosotros y es donde se van a plasmar nuestras carencias. No es un lugar para aventurarse y aprender sobre la marcha, es un terreno donde debemos llegar con la lección aprendida y donde debemos saber utilizar todas las técnicas de progresión y descenso con la mayor rapidez y seguridad; la montaña invernal requiere de un buen aprendizaje y de una correcta progresión, los clubs de montaña o profesionales titulados son un buen camino en ella. Por otro lado la dureza de este medio hace que debamos contar con una forma física adecuada a la actividad a realizar.
Material
Hoy el continuo trabajo de las marcas de material de montaña ha provocado que el material halla evolucionado hacia una práctica especializada en las actividades, lo que ha restado polivalencia al material, de esto hace que ahora sea más complicado acertar con la elección del mismo; esto a todas luces es lo peor dado lo que va bien para una cosa no lo es para otra, las marcas y tiendas no ayudan mucho y suelen añadir confusión o errores a la hora de elegirlo. Muchos piensan que ligereza es igual a rapidez y seguridad, sin contar que muchas de estos rebajes en el peso están hechos en el uso de material no apto para muchas condiciones, un caso claro son los crampones y piolet; saber escoger y acertar es uno de los componentes más importantes en la preparación de una salida.
Condiciones
La aparición de nuevos condicionantes nos pueden hacer caer en falsas apreciaciones si no sabemos evaluarlas.
- Aludes. Un actor nuevo y que esta presente en todo momento, máxime si tenemos en cuenta que la mayoría de ellos se producen con riesgo 3 y que este nivel es el que esta más presente durante toda la temporada; contar con el material adecuado y saber usarlo es otra de las premisas necesarias; hoy existen distintos boletines meteorológicos nivológicos su consulta es obligatoria antes de una salida.
- Meteo. Si bien este aspecto es el mismo, en invierno adquiere una mayor importancia, los rápidos cambios de tiempo, las horas de luz disponibles o su efecto sobre el terreno pueden ser determinantes a la hora de realizar una actividad.
Estos puntos son sólo una ligera muestra de todo lo que debemos tener en cuenta a la hora de plantearnos una actividad invernal, quizá los más importantes de todos sean los relativos al factor humano, saber nuestras limitaciones sea lo que plantee mayor problema, tal como refleja los resultados de una encuesta realizada por una campaña de seguridad en montaña en la que a la pregunta de si se encontraba seguro de tener el nivel para hacer la actividad programada: la respuesta era Por supuesto.
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