Participantes procedentes de una veintena de países dejan su huella en el desierto en solidaridad con el pueblo saharaui. La clásica cita atlética en los campamentos de refugiados de Tindouf ha cumplido 23 ediciones.
Carreras de Maratón, Medio Maratón, 10 KM y 5 KM, además de una multitudinaria carrera de niños saharauis, se celebraron en los campamentos de Tindouf (Argelia). Corredores internacionales y saharauis compitiendo y confraternizado sobre un desértico horizonte de arena y sol, a través de los campamentos de El Aaiun, Auserd y Smara. Centenares de refugiados saharauis han sido activos animadores al paso de los corredores por cada uno de los campamentos. El Sahara Marathon está organizado por la Federación de Atletismo Saharaui y el Ministerio Saharaui de Juventud y Deportes, con la ayuda de voluntarios saharauis e internacionales.
Sobre el terreno, los corredores españoles Marco Antonio Castillo y Óscar Santos lideraron la carrera reina compartiendo hasta el último metro de los 42KM del maratón. Un bonito gesto festejado por la multitud de refugiados saharauis que esperaba en meta la llegada de corredores y corredoras. Acompañándoles en el pódium estuvieron Houssam Marrouche (Argelia) y Gabriele Pellegrineschi (Italia). Por su parte, Katrin Grierger (Alemania), Marie Hélène Paré (Canadá) y Dulce María Rotaeche (España) fueron las corredoras ganadoras del pódium femenino. Completado los restantes cajones de Medio Maratón, 10MK y 5KM se alternaron corredores saharauis e internacionales tras disputar animadas carreras de puro desierto.
El Sahara Marathon es una carrera netamente solidaria con el pueblo saharaui que se celebra desde el año 2001 coincidiendo con el aniversario de la fundación de la República Árabe Saharaui Democrática. Son ya 23 las ediciones celebradas con los mismos propósitos repetidos durante estos años… Qué este evento deportivo internacional sea un altavoz frente a la cruel diáspora que viven las familias de refugiados en los campamentos del desierto argelino, hace ya cuarenta y siete años. Qué el pueblo saharaui tan injustamente tratado por la geopolítica internacional no caiga en el olvido. Y qué se cumplan los acuerdos de paz auspiciados por la ONU.
A lo largo de una inolvidable semana, corredores y corredoras del Sahara Marathon han sido participes de la afable hospitalidad de las familias saharauis. Al abrigo de fraternales vasos de té, participantes internacionales y refugiados saharauis sellan lazos que seguramente permanecerán el tiempo. Un año más el Sahara Marathon finaliza sus carreras en la arena del desierto argelino con el firme deseo de que tantas miles de familias saharauis regresen a su legítima tierra en el Sahara Occidental.