Mapa global de las placas tectónicas
El volcán Villarrica se encuentra en el límite entre las provincias de Cautín y Valdivia en el Sur de Chile. Mide 2847 metros y forma parte de la zona meridional de los Andes.
Ésta es una cordillera volcánicamente activa debido a su origen hacia el Oeste: la subducción de la Placa tectónica de Nazca bajo la de Sudamérica.
En dicho proceso de subducción, la corteza oceánica comienza a fundirse y a ascender a través de la corteza continental formando este tipo de cordilleras que también se conocen como arcos continentales.
La cuestión es cuándo entran en erupción dichos volcanes próximos a zonas pobladas y si pueden predecirse los futuros eventos.
Gráfico en el que se representa la subducción de corteza oceánica bajo corteza continental
Afortunadamente sí se puede, mediante el estudio de las propias estructuras volcánicas y la monitorización de éstas, atendiendo por ejemplo a la sismicidad volcánica (producida por el movimiento de lavas y gases volcánicos que ejercen presión sobre la corteza continental), la deformación del terreno y el flujo térmico y de gases entre otros.
El riesgo para las poblaciones cercanas varía en función del tipo de erupción que tenga lugar. Dichas erupciones están condicionadas por el tipo de magma, que puede ser clasificado de forma general como básico (bajo contenido en sílice) o ácido (alto contenido en sílice).
La sílice contribuye directamente a la viscosidad del magma o capacidad de retención de gases de manera que su liberación sea más difícil, un mayor contenido de sílice conlleva erupciones más explosivas que en función de diversos factores puede dar lugar a la formación de nubes piroclásticas (siendo éstas uno de los factores más peligrosos en las erupciones).
El volcán Villarrica el 14 de febrero de este año
En el caso del Villarrica se produjo una erupción de tipo Estromboliana, caracterizada por un magma predominantemente básico con contenido en volátiles que dan lugar a ráfagas explosivas no muy potentes e intermitentes. A pesar de ello, las zonas que pueden llegar a ser afectadas por lavas y lahares alrededor de este volcán (o zonas de riesgo) pueden llegar a los 20 km, especialmente los valles y zonas topográficamente deprimidas.
Actualmente el Servicio Nacional de Geología y Minería de Chile (SERNAGEOMIN) mantiene el nivel de alerta volcánica naranja y la zona de exclusión a 5 kilómetros de radio del cráter.
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